Es bien sabido que una de las consecuencias que ha tenido la crisis capitalista ha sido la conversión de nuestro país de receptor de trabajadoras trabajadores migrantes a emisor de los mismos.
De esta manera, es común para cualquiera de nosotros conocer, o en algunos casos sufrir, la partida de muchos de nuestros familiares o amigos fuera de nuestras fronteras, en busca de un futuro mejor.
El problema hoy, es que la crisis capitalista, y con ella, la necesidad de los grandes empresarios de arrasar con las condiciones de trabajo, no es local ni nacional, sino que afecta a las y los trabajadores de todo el mundo.
Y ahí es donde nos encontramos con la realidad de los minijobs alemanes, ahí es donde, huyendo de la explotación a la que nos somete el capitalismo español, nos encontramos con la que nos ofrece el capitalismo alemán, dos caras de una misma moneda.
¿Qué son los minijobs?
Los minijobs son una modalidad de trabajo que tiene como características principales las siguientes:
- El salario de los minijobs se sitúa entre 450 y 850 euros mensuales. Esto contrasta con el resto de empleo en Alemania, cuyo salario mínimo es de 1.498 euros mensuales.
- En los minijobs, se trabaja una media de 50/54 horas mensuales, lo que implica que muchos trabajadores y trabajadoras tengan que tener varios minijobs para sostenerse, de modo que cuando superas los 850 euros mensuales, su consideración a efectos de Seguridad Social sería similar a la de otros tipos de contratación.
- Si el salario no supera los 5.400 euros anuales, o lo que es lo mismo, 450 euros al mes, no está sujeto al pago de cotizaciones a algunos seguros sociales. Ante esta situación hay dos opciones:
- Puedes afiliarte de forma voluntaria al seguro de pensiones. Por tanto, podrás abonar de tu bolsillo la cotización de forma regular y acceder a las prestaciones que conlleva.
- Puedes no hacerlo, y solicitar al empresario que las excluya del seguro.
- Con una incapacidad laboral por enfermedad, tienes derecho a percibir una prórroga salarial durante un máximo de 42 días, siempre que la relación laboral tenga al menos una duración de cuatro semanas en el momento de la baja. Las bajas por maternidad se regulan también de la misma manera.
- En el caso de una eventual incapacidad laboral tendrías derecho a unas prestaciones de rehabilitación o a una prejubilación. También si lo deseas, podrías hacerte un fondo de pensiones privado subvencionado.
Así, tras un pequeño análisis de las condiciones que implica un minijob, podemos comprobar cómo su objetivo económico es el de legalizar el trabajo a precios irrisorios, y en consecuencia, introducir una tendencia a la baja en el resto de modalidades salariales, generando un empobrecimiento general de las y los trabajadores.
De este modo, el impacto económico de los minijobs no solamente afecta a los trabajadores y trabajadoras migrantes, sino que sirve como herramienta de explotación de las y los estudiantes y de las y los jubilados, tal y como confirman los últimos estudios del Instituto Económico y Social (WSI).
En conclusión, es difícil escapar a la explotación de los trabajadores y trabajadoras impuesta por los monopolios y, aunque es innegable que según los países el nivel de explotación es mayor o menor, la tendencia a elevar nuestra explotación para remontar sus beneficios es internacional, por tanto, no hay escapatoria posible. O aceptamos que nuestras condiciones de vida empeoraran constantemente a lo largo de los años, o nos organizamos y las defendemos hasta las últimas consecuencias. Todo lo demás, es salir del fuego para caer en las brasas.
Luis Muñoz Gutiérrez