El País es el periódico del Pirulí. Lo mismo le dedica un amplio reportaje a los selectos restaurantes de la Guía Michelin a lo Digest como a las intrigas del agente 007, en este caso se refiere como inteligencia occidental al espionaje otanista-atlantista y como espionaje a la inteligencia rusa. Todo ello obedece a la perversión del lenguaje de Prisa y su burdo afán manipulador. El minimalismo posmoderno consiste en minimizar las masacres en Ecuador, Chile, Bolivia y Colombia. El apoyo irrestricto al genocidio y el golpismo fascistas en Latinoamérica por parte de los medios y de los gobiernos de la UE que callan, otorgan y por lo tanto apoyan al fascismo neoliberal. El País es la vox golpista. Yankilandia y UE imperialistas unidas en un destino universal.
Pues bien, en el marco de las movilizaciones en Chile contra el gobierno neopinochetista de Piñera y sus políticas neoliberales, hubo una iniciativa de 50 artistas chilenos de interpretar la canción “El derecho de vivir en paz “ de Víctor Jara. Este coro entona la canción y cambia la letra en un intento de perversión, manipulación del oportunismo a la hora de rentabilizar el hartazgo en Chile.
La letra manipulada viene a recordarnos a aquella canción de “Libertad sin ira “ de Jarcha...”el derecho de vivir sin miedo en nuestro pais/en conciencia y unidad con toda la humanidad/con respeto y libertad/un nuevo pacto social”. La canción también difundida por CNN a bombo y platillo. ¿Como se puede ser tan cínicos?...los reformistas-oportunistas utilizan un escuadrón de cantantes para que el descontento social se canalice a un nuevo pacto social con la oligarquía chilena. Nuestro apoyo total a la lucha popular en Chile y la denuncia del reformismo por manipular una canción emblemática antiimperialista y revolucionaria de Victor Jara.
Esa letra bien podría haber utilizado la música de alguna canción de Juanes o Miguel Bosé que bien representan a los miserables imperialistas y bien callados que están como auténticos cerdos.
Miguel Ángel Rojas