Desde el PCPE, ante la movilización del 17 de marzo, queremos manifestar que estamos por la justa lucha de la defensa de las pensiones públicas; por el sindicalismo de clase y de la Coordinadora Estatal de Pensionistas, por la Marea de Pensionistas, y por las y los pensionistas en general; estos saben la postura de nuestro partido en escritos anteriores.
La lucha de los y las pensionistas y la del movimiento obrero van unidas; la política en derechos socio laborales es un todo que debemos de defender. Otra cosa es lo que el sistema del capital viene aplicando en sus leyes anti obreras en defensa de los intereses del capital y de los imperialismos yanqui y europeo, dentro de su estrategia en la lucha de clases con la mira puesta en unos objetivos netamente mercantilistas y de acumulación; hechos estos muy definidos por parte de la dictadura del gobierno del PP y de la socialdemocracia.
Últimamente ante la prensa escrita y los medios de comunicación burgueses se está criminalizando la justa lucha de nuestros pensionistas; mientras en el seno de sus consejos de administración se mueven sueldos de 4,000 a 5,000 euros más dividendos; limitándose su propaganda a normalizar ante la opinión pública el hecho de que no habrá pensiones públicas en el futuro próximo, siendo cómplices necesarios del atropello que se comete contra los y las pensionistas, quienes se ven obligados a mal vivir con pensiones por debajo de los 600 euros al mes. La respuesta que se hace necesaria dar al capital y a sus defensores para revertir esta realidad, es trabajar por la unidad obrera
La posición del PCPE, en la defensa del sistema de pensiones, pasa por una apuesta en la creación de un frente de lucha común que aúne el sindicalismo de clase y las organizaciones de pensionista a nivel estatal. El Partido, en defensa de un derecho vital para quienes todo lo producimos y somos obligadas/os a entregar nuestras vidas a la generación de plusvalía, exige la derogación de todas las Reformas de las Pensiones, incluido el "pensionazo" firmado por organizaciones sindicales que deberían defender exclusivamente los intereses de nuestra clase; así como las Reformas Laborales tanto del PP, como del PSOE, que sirvieron como ariete a la patronal para despedir a millones de trabajadores, abaratando y precarizando las condiciones de trabajo y los sueldos, condenando a la miseria a millones de familias trabajadoras. El Partido solo sabe, y así está en la historia de la clase obrera, que sus derechos se conquistaron con organización y lucha en las calles y centros de trabajo.
Desde la vanguardia revolucionaria debemos señalar el papel electoralista y oportunista de la socialdemocracia burguesa, haciendo caso omiso de la problemática que se venía fraguando desde el capital; y que solo ha decidido actuar en el momento que las movilizaciones superaban a los partidos oportunistas que la componen. También hay muchos de estos que en las movilizaciones y manifestaciones no quieren que se exhiban las banderas y los símbolos de la clase obrera, ya que muchos de ellos están muy cómodos en el sistema burgués borbónico y han traicionado lo que es la ideología de las lucha de clases y su objetivo histórico, el socialismo-comunismo.
Por todos los medios tratan de convencernos de que ya no hay dinero para nuestros pensionistas; pero sí hay para subir el 83 % al Ministerio de Defensa en hacer submarinos que son inservibles, en bonificar a las grandes empresas en subcontratos con el 80% de descuento; también sobra el dinero para la inhumación y repatriación de los divisionarios de la División Azul, en subvencionar a la Iglesia en 11000 millones anuales. Estas son las malas entrañas que tiene el Gobierno del capital para engañar a nuestros mayores pensionistas.
Ante todo esto tenemos que tener muy claro pensionistas y trabajadores, que si no salimos de la UE, el Euro y el Fondo Monetario Internacional; perpetuaremos el expolio, sobre nuestra clase y las capas populares, por parte de la banca, la patronal y el gobierno que los sustenta.