Con la publicación de un texto escrito por la investigadora alemana Christiane Barckhausen-Canale, la embajada de Cuba en Italia conmemoró hoy el aniversario 124 del natalicio de la artista y revolucionaria italiana Tina Modotti
Dibujo de Tina Modotti, de Diego Rivera
De un manera creativa y bella, la investigadora y escritora alemana Christiane Barckhausen-Canale, conocida como la mayor experta en la vida y obra de Tina Modotti, rinde homenaje este 16 de agosto a la revolucionaria, de quien se conmemora el 124 aniversario de nacida.
A través de una carta, publicada en el sitio web de la embajada de Cuba en Italia, Barckhausen-Canale reflexiona con Tina sobre la vida que hubiera llevado si no le hubiera tocado vivir «persecuciones, difamaciones y guerras», y «hubieras podido ver la victoria sobre el fascismo, la independencia de tantas ex-colonias en África y Asia y, en muchos países del mundo, revoluciones y intentos de construir una sociedad más justa y de formar mujeres y hombres nuevos, es decir, más humanos».
Tina Modotti nació el 16 de agosto de 1896, en la ciudad de Udine. Su existencia fue breve: «duró solo 45 años, pero fue una vida muy intensa y siempre dedicada a los demás», dice la investigadora. Falleció en 1942.
La autora de "Verdad y leyenda de Tina Modotti", libro ganador en 1988 del Premio Casa de las Américas, se pregunta en la misiva donde habría vivido Tina de no haber muerto.
«Quizás hubieras regresado a Italia, el país donde naciste, o quizás te hubieras decidido de quedar en México, el país donde has vivido por más tiempo y al cual has regalado tus fotografías que hoy se exhiben en todo el mundo. Pero yo estoy segura que, después de 1959, te hubieras mudado a Cuba, donde había triunfado la revolución que tanto anhelaste», escribe.
«Cuba tenía un lugar muy especial en tu corazón, aunque habías pasado solo 3 días en la isla (…) De haber estado viva en 1959, hubieras ido a vivir a Cuba porque a la isla te ligaba tu breve, pero intensa unión con Julio Antonio Mella, el gran amor de tu vida. Ustedes dos vivieron lo que pocas parejas logran: la total identificación recíproca, hecha posible porque ustedes compartieron el mismo sueño, la revolución», agrega en otra parte de la carta.
«En tu país, Mussolini perseguía a quienes no pensaban como él, y en Cuba gobernaba Machado, al que Mella llamaba “el pequeño Mussolini”. Tú con tus fotografías, Mella con sus artículos y con la organización de los cubanos exiliados en México, ambos trataron de hacer consciencia en las masas oprimidas.
«Con Mella, incluso, trataste de realizar otro sueño: el de formar una familia. Como tú, por problemas de salud, no podías tener hijos, quisiste traer a México el hijo de tu hermana Gioconda, pero el régimen fascista no le dio permiso de abandonar Italia.
«Si hubieras vivido más tiempo, Tina, habrías visto nacer, en Cuba, la Unión de los Jóvenes Comunistas, cuyos miembros llevaban en la camisa o en la blusa un distintivo con la foto de Mella que tú le habías sacado en 1928, en México, como has inmortalizado también su máquina de escribir», agrega.
Para una Tina contemporánea, narra la investigadora los sucesos que sacuden al mundo ahora: fuerzas neofascistas en Italia, en Alemania, en España… y, mientras tanto, Cuba manteniendo en alto la bandera de la solidaridad: «No con brigadas de combatientes, sino con brigadas de personal médico que ayuda donde esta ayuda hace falta», añade.
