Canarias es tierra de migración. El pueblo canario en momentos de hambre y miseria se vio obligado a emigrar masivamente y de forma clandestina a países de Latinoamérica (Cuba, Venezuela, Argentina, …). Al pueblo africano le toca actualmente padecer el mismo sufrimiento. No olvidemos las causas, el continente africano ha sido explotado, saqueado, expoliado y esquilmado de sus riquezas y recursos naturales durante muchísimo tiempo por parte del colonialismo e imperialismo.

La llegada a las costas isleñas de cayucos y pateras no es nada nuevo, ya hace 26 años, allá por el año 1994, que empezó el éxodo migratorio. Y en todo ese tiempo los Gobiernos Centrales y autonómicos, así como la UE, han aplicado una política migratoria totalmente nefasta y deplorable.

En diversos municipios de las islas, a los y las migrantes, las hacinan en espacios donde no se les respeta su dignidad ni sus derechos básicos. Un trato vejatorio con personas durmiendo en el suelo, con baño portátil para 30-40 personas, recintos con insalubridad y sin posibilidad de guardar las precauciones básicas frente a la COVID-19. Lamentablemente en Gran Canarias, y por tales condiciones infrahumanas, ya hay un lugar en el muelle de Arguineguín (Gran Canaria) que se le conoce con el sobrenombre “Campamento de la Vergüenza”. Además, es habitual también la vulneración del derecho a la asistencia jurídica o la información sobre solicitar asilo. Se da orden de expulsión independientemente de sus circunstancias personales y, muchas de las veces, sin información clara en su idioma que pudieran entender.

Indiscutiblemente, desde las instancias gubernamentales no existe ninguna voluntad política a la hora de facilitar los medios necesarios para la acogida, atención y trato digno de las personas que llegan a las costas Canarias. Todo lo contrario, están propiciando un racismo institucional cuando piden que lleguen turistas ricos europeos pero rechazan a quienes buscan una vida mejor. A lo que hay que sumar el papel que juegan ciertos medios de comunicación que sirven de altavoces a intereses económicos y políticos del magnate sistema capitalista. Manipulan y mienten al pueblo, tratan la migración como si fuera un delito, propagan el miedo y el odio, alimentan las actuaciones y episodios de racismo y xenofobia.

El Partido Comunista del Pueblo Canario (PCPC), que unitariamente participa con otros colectivos y organizaciones en la “Red Canaria por los Derechos de las Personas Migrantes”, desarrolla un trabajo de concienciación y lucha política en el que:

1.- Exigimos un trato digno, con todos los derechos y libertades garantizadas respetadas y protegidas a estas personas que se juegan su vida por unas mejores condiciones de vida y trabajo digno.

2.- Cierre de los CIE (Centros de Internamiento de Extranjeros) que son auténticas cárceles para migrantes.

3.- Papeles para todos y todas, ninguna persona es ilegal. Por lo tanto, rechazamos las devoluciones en caliente

4.- Abolición de la Ley de extranjería, que mata gente todos los días. Habilitación de pasajes y rutas seguras, no permitir que sigan falleciendo personas en el mar.

5.- Cese de la criminalización de las personas migrantes. Que acabe el tratamiento policial y militarista de las fronteras, que se extinga el negocio de las guerras. Exigimos el cierre del Frontex como agencia deportadora que no rescata y que hace el trabajo de externalización de fronteras.

Que no quepa ninguna duda, la militancia comunista seguirá trabajando en la Solidaridad Antiimperialista con nuestros hermanos y hermanas africanas porque como dice la consigna “De aquí o de fuera, la misma clase obrera”

Paqui Sánchez

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