¡Qué bonito es un entierro así! Con fanfarria, fausto, pompa, grandeza, magnificencia y ostentación. Y después de casi un siglo… “Better late than never”.i

¡Qué triste resulta la del trabajador anónimo que parece una burla a la vida! Algo de sorna, desprecio o escarrnio. Incapaz de dejarnos algo más que lágrimas privadas. Un pequeño evento sin gasto ni dispendio, sin derroche ni despilfarro. Vulgar, chabacano, ramplón, ordinario… “Beggars can’t be choosesrs”ii

No hay duda, prefiero la del monarca, aristócrata o gran burgués. Pero sin envidias, a falta del propio, me alegro del ajeno. “The early bird catches the worm”.iii

Que no es para tanto, aunque sí vistoso eso que llamamos funeral de Estado, que pareciera que todo el aparato represivo y burocrático hubiera de enterrarse; sin embargo, es solo algo simbólico, alegórico, meramente figurativo o metafórico. “All that glitters is not gold”iv

Siempre lo asocié a caballos blancos, salvas al aire y uniformes verdes llevando el paso de algún Ecce homo con restos de metralla. Y una multitud de manos blancas al alba cortando el silencio con loas, encomios o alabanzas al aire de raza patria. Sentimiento sencillo, zonzo pero honesto de multitud vehemente. Lo reconozco, anhelos de juventud, quizá añoranza, melancolía o nostalgia de la infancia. “Beauty is in the eyes of the beholder”.v

De Balmoral a Londres pasando por Edimburgo. Como aquella Guantanamera de Tomás Gutiérrez Alea y Juan Carlos Tabio, paseando a la finada por la isla, levantando pasión y ánimo regio entre los súbditos como un Cid anglosajón luciendo las joyas de la corona. ¿Puede haber más lujo, suntuosidad u opulencia?

Historia en vida que no pudo ocultar la muerte. Ni los más de cien mil caídos en la Revuelta Mau Mau de Kenia, ni los vietnamitas masacrados con la incondicional alianza de Australia y Nueva Zelanda con EEUU, ni el apoyo al Ente sionista de Israel en la Guerra de los Seis Días y el Yom Kipur Abrada, ni el sometimiento al Ulster con sus más de 3500 decesos, ni las Malvinas, Irak o Bosnia… Nada de eso puede ensombrecer algo tan bello como la Operación Unicornio o la Operation London Bridge. “No pain, no gain”vi

“The death Queen” como diría nuestro Chiquito de la Calzada. ¿Puede haber mayor homenaje?

Quizá la declaración de tres días de luto oficial de Ayuso podría estar a la altura, aunque los hay que piensan que llega 118 años tarde y es que donde estuviere la Castiza, la de los Tristes Destinos, que se quite la Lilibet.

Y es que teniendo en nuestro haber una señora copla que decía “Isabelona tan frescachona y don Paquita tan mariquita”, ¿qué nos aporta su “God save the Queen”?

Enterremos el chovinismo que nos pierde. Que en todas partes cuecen habas y todas las casas reales tienen su Marichalar. Demos a la inglesa el último adiós como Dios manda, con decoro, recato, dignidad y honra, que al final se ha ido la hija de la Reina Madre y la Madre del Rey hijo.

Asistirán al sepelio precioso, reyes y reinas, gobernadores y coroneles, barones y secretarios, cardenales y gobernadores. Y nuestra Casa real ..., tan real como nuestra expectación ante tan estupendo espectáculo. Y desde nuestra casa real, pegados al televisor, haciendo fuerza, esperando que los nuestros recojan el testigo o el ramo lanzado por la novia de la muerte y que nos homenajeen pronto con algo similar en grandeza, generosidad, magnificencia, grandiosidad, que ya nos vamos mereciendo ser el centro del mundo otra vez, alguna que otra vez.

Crispín de Sotogrande.


i“Más vale tarde que nunca”

ii“Los mendigos no pueden elegir”

iii“El pájaro que se adelanta atrapa el gusano”

iv“No es oro todo lo que reluce”

v“La belleza está en los ojos de quien mira”

vi“Sin dolor no hay ganancias”

uyl_logo40a.png